martes, 1 de junio de 2010

87...


El Nº 87 realmente no era nada estético  para los demás  pero a él  lo que le importaba era el significado
Estaba  ahí  y había sido grabado entre tinta, sangre y lágrimas  en el pecho  junto a su corazón
Habían sido varios los amores pero solo uno había alcanzado  el honor a ser llevada en la piel para siempre (como dicen los enamorados)
 En el último día de su vida... antes de partir coloco su mano en su pecho tratando de apretar fuertemente  aquel número 87  de Ella... suspiro profundamente... cerró los ojos... y se fue contento repitiendo 87, 87…

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