A quién importa la edad de...
A quién importa la edad de una mujer interesante, que exuda entusiasmo y amor por la vida; que impresiona con algo que va más allá de la presencia física; especialmente aquella que ya no es una chiquilla inmadura y alocada, sino que endosa en su personalidad esa parte de la juventud que nunca perderá y ese aplomo frente a cualquier situación, que la hace admirable, naturalmente bella, segura de sí misma, un poco enigmática y como la fruta “hecha”… deseable. Se la ve llegar y la examinan de arriba abajo; la perciben pulcra, con aroma de flores de mañana fresca, con atuendo discreto pero muy femenino, donde se conjuga la coqueta vanidad de mujer bonita, con la elegancia que corre por sus genes, para hacer ese cóctel mágico que la hace especial y… “sexy”. Pertenecemos a una generación romántica pero realista; que amó y sabe amar intensamente, pero segura del derecho a la reciprocidad merecida. Que por amor lo da y exige todo; que no endosa la dignidad ni identidad en aras de un sentimiento que limite o niegue a amar con libertad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario