Y sí, la verdad todo lo que deseo es una felicidad suavecita y hasta media previsible, sabes: diría algunos de mis deseos... Quiero una casa de paredes blancas con ventanas de madera bien rusticas, y eso sí tiene que tener bañera y una gran cocina con horno y cocina a leña, un hogar gigante en la sala y también en el cuarto, techo con grandes vigas de madera, una super tv para las películas de domingo, quiero tres perros, varios árboles frutales en el jardín, oír el canto de los pajaritos, quiero despertar a la mañana y sentir aquel olorcito de café y las ropas con el perfume de jabón de coco. Quiero un porche calmo diría hasta con un libro pero prefiero un lap, un cariño a la mañana y otro antes de dormir. Quiero comida china sentado en el piso de la sala y carcajadas en la madrugada del sabado a la noche. Quiero ser yo mismo y entregarme de cuerpo entero... y que tú no me mires con aire de sorpresa y si con éxtasis...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario