Ya has agotado
todos los recursos que tendrás a tu alcance para relacionarte con una persona y al tener una
computadora disponible, estas tratando de relacionarte con alguien en sitios de
internet, no es raro, es la realidad que
vivimos hoy en día. Conozco parejas felices que se han vinculado por este medio y también tengo conocimiento de
muchos intentos fallidos e
historias complicadas. Algunas personas por seguridad o desinformación lo siguen considerando como algo que jamás
harán, o es más, no toman
en serio este tipo de contacto. Hablando de seguridad es bueno detenerse en ciertas premisas para relacionarse, digamos no solo de seguridad en lo personal sino en lo afectivo y mental, para que la experiencia sea lo más sana posible. Es preciso saber que,
entramos en un mundo irreal en donde
tiene el color del deseo propio y el condimento de la propia fantasía de cada uno de nosotros, estamos en un mundo de fantasía creado por todos los que entramos en
el. Podemos y nos pueden decir cualquier cosa, creamos una comunicación en base adulces mentiras u objeciones de la realidad, cualquier cosa vale en un principio para llamar la
atención.
Entonces debemos
leer con atención los emails, con el correr del tiempo la persona puede o no ser consistente en lo que dice, ojo si cambia su
discurso. No depositemos todas nuestras esperanzas en esta persona, no es la tabla de salvación que nos
hará dejar de estar en
soledad o la que llenara los vacios que tengamos. Nadie completara tu vida, si tú no te abocas en asumir y subsanar los problemas emocionales que tengas antes de abordar una relación por cualquier motivo causa o razón. ¿Sabes lo que
quieres? No te quedes en la fantasía. Si pasas más tiempo delante de la computadora que fuera de ella, no solo estas creando dependencia, te estás enfermando y lo peor, te estás perdiendo la vida real. Entonces trata cuando puedas, si no hay encuentro posible, de amenizar la relación hablando por teléfono con el o con ella. El tono de voz es esencial para dilucidar si hay mentira, frescura en el
dialogo, en definitiva si
nos agrada la persona. Usa tu intuición. Si acuerdas encontrarte en persona,
que sea en un lugar concurrido,
con buena iluminación.
Si eres mujer,
llega sola y vete sola, que no te pase a buscar por tu casa. Fundamental, si tienes dudas hazte acompañar por alguien, aunque se siente en otra mesa o te pase a buscar al final de la cita. Lo demás corre por cuenta de cada uno de nosotros, sabemos como dicta nuestro corazón y como medimos las acciones más allá de las palabras para saber en definitiva si es la persona indicada la que conocimos. ¿Indicada para qué?
solo tú y ella lo sabrán... (Texto
de) Daniel C
(Un Poeta y contacto delicioso)...
Dulce
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