Ser sensible en este mundo, requiere mucha coraje, mucha, todos los días, esa forma de ver mas allá de los ojos de oír mas allá de los oídos, de sentir la rectitud del sentimiento ajeno tan clara en el propio corazón. Esa sensación, a veces de ser extranjero y no saber hablar el idioma local, ser medio “ET”, una especie de sobreviviente de una civilización extinguida. Esa intensidad tosa en tiempo de ternura menguada. Ese amor tan vivido en tierra en que la mayoría parece asustarse más con el afecto que con la indelicadeza. Ese cuidado espontáneo con los otros. Esa voluntad tan pura que nadie sufra por nada. Ese malandraje de herir por saber, con nitidez, como duele ser herido. Ser sensible requiere mucha coraje, mucha… todos los días. (Ana Jácomo)
Muchas veces el coraje que se tiene
que tener es la de continuar siendo sensible a los momentos y gestos mas lindos
de poder sentir a nuestro prójimo como a nosotros mismos. Deseo de todo corazón
que todos nosotros continuemos bien sensibles, bien capaces de sentir los
momentos más lindos que pasamos en nuestras vidas y que jamás las dificultades
nos hagan perder nuestro mayor bien… El amor verdadero.
Besos de luz Marisa
Marisa solo me resta decirte gracias por tan bello escrito y posterior comentario tuyo sin extenderme simplemente adoré. Tu sensibilidad y coraje sobresale ampliamente dentre este mundo de fantasiosos gigantes. Ral-Diablo
QUE TODA NOSSA SENSIBILIDADE SEJA MANTIDA, NÃO É O SÓ O DESEJO DE NÃO PERDE-LA, MAS QUE ELA FIQUE IMENSAMENTE A FLOR DA PELE.
ResponderBorrarBEIJOS DE LUZ