Cuando mi silencio no
encuentra razón me descubrí escribiendo en una servilleta bebiendo café,
mientras mordía mis labios para no gritar. Es difícil silenciar al corazón
cuando tiene mucho que decir, negar toda la razón por simplemente dejar a otros
vivir; parece una locura callar y una tortura el no poder hablar enmudecer mi causa
me produce dolor es un veneno apagando mi calor; contando los segundos aflijo
mis labios secos mordiéndolos por dentro, flagelándolos por fuera y escucho en
mis adentros un fuerte eco que me dice que siga así hasta el momento en que
muera. Justa causa que confunde mi lógica triste vida la que vivo para entender
la razón porque para mí esta situación me sonríe de forma irónica y se burla de
mi triste condición; pero he decidido escribir porque mis dedos merecen vivir y
disfrutar la libertad que no tiene el corazón, hoy la mente toma el control, al
fin tengo una razón!; si hoy callo es por amor, aunque esto me produce dolor y
si no entiendo el por qué, gritaré como un mudo con gestos y señales coherentes
que solo entenderá aquel que viva en el mundo del silencio…
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