Mi vida se modifico cuando en un instante vislumbre tu sonrisa,
encantadora y conquistadora, La sublime expresión del amor... Sonrisa de niña,
sonrisa de mujer, sonrisa de vida... me di cuenta después de mucho tiempo
cuanta belleza hay en tu sonrisa. Esa sonrisa de niña adolecente, niña de mis
recuerdos, de infancia inocente… Al final, tu sonrisa es radiante, es
brillante, es un sentido de mi esperanza, de mi vida y de mi vivir… Sonrisa que es una canción de alegría, no tiene sexo, es como una partitura musical, es la
verdadera melodía de mi felicidad. Tu sonrisa es angelical, es el
paraíso. Tu expresión es para levantar cualquier astral, tiene el don de
alegrar y transformar mi día en alegría. Cuanta belleza hay en tu sonrisa espontánea, aquella que me es brindada gratuitamente. Basta apenas tu sonrisa, mi dulce Ángel, para que yo sienta un día mejor, para
que yo sienta más alegría en mí vivir, pues tiene la magia de
perfumar e iluminar mi vida. Esa tu sonrisa silenciosa es como una lluvia mansa
que cae e inunda mi corazón de alegría, es como una brisa suave que acaricia y
propicia el refresco para mi alma. Es difícil imaginar que no me sienta bien
con tu sonrisa, ella consigue transformar mis tristezas en alegrías, mis
lágrimas en sonrisas, mis dolores en placeres, es una dádiva de la
vida. Es el regalo más admirable que puedo recibir. Ella remueve
barreras, derriba preconceptos, me conquista, me conmueve y entibia mi alma. Reverencio aquí a tu sonrisa, el poder y la belleza que ella tiene para me
conquistar. Yo no me sonrío porque soy feliz, yo soy feliz porque tengo tu
sonrisa.
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