Hoy luego de más de veinte
días de tormento me diste el sol, si hoy amaneció distinto mi día amor, esa
sonrisa no se borraba de mi rostro, una felicidad inconmensurable me invadió el
alma, sé que fue tu luz, el brillo de tus ojos me devolvió la vida, tus
palabras me llegaron como elixir a mi corazón, sabes alguien al leer mis
escritos, me dijo: como un hombre puede llegar a amar tanto así, quiero un
hombre así para mí, me sorprendió, te lo aseguro, solo le respondí: es porque
tu no conoces a mi Gabucha como yo la siento y la venero, sabes, se merece todo
ese mi amor y muchas veces siento que me falta más.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario